Ídolos del Fútbol - José Omar Pastoriza

¿Estás harto de que en la tele, el celu o la compu solo haya fútbol? ¿Prendés la radio y hablan de fútbol? ¿En la calle, en el trabajo, en el bondi solamente se habla de fútbol?

Bueno, "Columberos" te trae...  ¡¡MAS FÚTBOL!! 👻

Publicado en la revista D'artagnan Extraordinario N° 235 impresa en Agosto de 1970, con guion de Pedro Valdés y dibujos de Héctor Tomás Rodríguez. Y de yapa, "Ahora ríase".

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"El Pato" fue un volante central, dirigente gremial y director técnico. Un personaje del fútbol en todas sus facetas. Un gran jugador, un luchador en el gremio y un exitoso entrenador. Trascendió siempre, con una personalidad que no varió en sus múltiples actividades. También se dedicó al comercio: tuvo varias pizzerías y otros negocios. Rosarino, iniciado en las inferiores de Central, sobresalió en la Primera de Colón en los certámenes de ascenso. De allí lo contrató Racing, por pedido de su técnico Néstor Rossi. Al equipo no le fue bien, pero Pastoriza cumplió a satisfacción. Con Pizzuti como entrenador, aquella fue la base del conjunto que arrancó en la segunda rueda de 1965 la serie invicta de 39 partidos, completada al año siguiente por El equipo de José. Fue transferido a Independiente por necesidad económica; por él fue Mori a Racing, más una importante suma. En los Rojos llevó a cabo su gran campaña. Cuatro veces campeón (tres locales y una Libertadores), se hizo patrón del equipo por su personalidad, don de mando y capacidad de juego. Allí alternó con la actividad sindical, con el cargo de secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados. Fue gestor principal de la huelga de 1971, que reivindicó la lucha de los jugadores en procura del Estatuto del Futbolista Profesional, logrado unos años después. Pero esa lucha lo obligó a irse del país. Actuó en el Mónaco de Francia, donde fue figura.

A su regreso, inició su larga carrera de técnico. Con un estilo propio, alejado de las tácticas pero con un lenguaje llano y directo, basado en la creación de un grupo unido y aguerrido, tuvo grandes triunfos en Independiente (campeón local, de Copa Libertadores e Intercontinental). Dirigió en el exterior varias veces (España y Sud y Centro América), y aquí en Argentinos Juniors, Racing y Talleres de Córdoba. Su paso por Boca marcó el fin de la carrera de Gatti y el surgimiento de Navarro Montoya. También tuvo fracasos, como irse al descenso con los cordobeses. Además participó en un suceso nunca bien aclarado, cuando fue detenido en Córdoba, en 1981, por interceder en un caso de adulteración de naftas, del que después la Justicia lo desligó completamente.

En Argentina jugó 237 partidos convirtiendo 34 goles en Racing (1964-65, 53 partidos, 2 goles) e Independiente (1966-72, 184 partidos, 32 goles).

(Fuente: Diccionario Enciclopédico del Fútbol Olé -Abril 1998- y ABC del Ascenso Olé -Junio 2001-).