Especial Robin Wood

¡¡¡Llegamos a las 10.000 entradas!!!

Llegamos a los 10.000 posteos, un par de meses antes de nuestro 4° aniversario, y si vamos a ser sinceros, cuando creamos el blog nos dábamos por contentos si a esta altura llegábamos a los 2.000. Por suerte no fue así, y queremos festejarlo con un posteo especial dedicado a Robin Wood.

Para aquellos que llegamos a las historietas de Columba a partir de la década de 1970, hablar de Columba es casi lo mismo que hablar de Robin Wood: si bien por la editorial de la palomita han pasado excelentes guionistas, la mayoría de los Columberos empezábamos las revistas leyendo sus historietas, y luego seguíamos con el resto.

En esta ocasión especial, los miembros del Equipo de Columberos les contamos qué historieta es especial para nosotros (y por qué), y también les traemos unas cuantas historietas de Robin Wood para que todos las disfruten como nosotros:

Gustavo Rodríguez (toritodel2001): Mi llegada al mundo de Columba fue al mismo tiempo mi descubrimiento de Robin Wood.

Enero de 1976, veraneo en Mar del Plata, 8 años de edad y una racha de días feos que no se podía ir a la playa. Ya había leído (varias veces) todas las Patoruzito, Larguirucho y Pato Donald que tenía, y mi mamá me cerró el crédito para revistas. Mi hermano y mi papá leían Columba, y mi hermano me recomendó algunas series de D’artagnan: Nippur, Dennis Martin y Jackaroe. Y ahí me enganché irremediablemente a Dennis Martin. Posteriormente fui descubriendo otras series (Los Aventureros, Pepe Sánchez, Big Norman, Kayan) y seguía atentamente todo lo que escribieran “mis tres guionistas” favoritos: Robin Wood, Robert O’Neill y Roberto Monti. Y gracias a “Mi Novia y Yo” descubrí que los tres eran uno solo. Y los personajes de este señor seguían llegando, y el presupuesto no daba para seguir a todos, así que el bolsillo hizo que me decidiera por Mark y Nippur. Y gracias a Nippur llegó Dago.

Es difícil elegir un personaje entre tantos, y es difícil también elegir una historia específica de Robin. Pero hay un tema que siempre me atrajo y que Robin aprovechó varias veces: ¿qué pasa cuando el enemigo no tiene forma física, cuando no lo podés derrotar de un espadazo o una trompada?  ¿Qué pasa cuando el enemigo es una enfermedad, o el hambre?

Nippur tuvo que enfrentarse a la peste luego de la guerra contra los Hititas en Egipto. Luchó contra lo imposible, y contra eso no se vence. Perdió a su gran amor, Nofretamón, pero ganó el amor del pueblo de Tebas (“Nippur, bendito seas. No por tu guerra y por tu gloria. Bendito seas por tu corazón deshecho…”).

Kayan también luchó contra la peste en Túnez (“¡Nadie puede detener a la peste!” “¡Yo puedo! ¡Yo lo haré!  ¡El que no quiera morir que me siga!”). Y como Nippur, también perdió a su amada, pero el pueblo de Túnez (y Genserico) lo eligieron como Rey de los Vándalos. 

Pero mi episodio favorito es aquel en que Dago, luego de la guerra de Etiopía, decide combatir al segundo peor enemigo de la Humanidad: el hambre (“Me gustaría hacer algo que no sea guerrear. Quiero otro tipo de batalla”). Este episodio se publicó en 1987, y creo que si quienes nos gobernaron desde entonces lo hubieran leído, nuestros países no estarían tan mal actualmente.

Diego Segovia (Diego_S): Editorial Columba es para mí, sinónimo de buena lectura, entretenimiento, viaje a la aventura, disfrute en familia, y una gran compañera en mi vida.

No recuerdo exactamente a qué edad tuve contacto con la primer revista; tal vez fue a los cinco o seis años. Sí, recuerdo, que lo primero que buscaba para mirar eran los dibujos de Vogt, por supuesto no sabía en ese entonces que Carlos Vogt era el nombre del hacedor de fantasías. Y digo mirar, por que todavía no sabía leer, entonces comenzaba por los dibujos más simpáticos. Y entre esos dibujos, me gustaba el no menos simpático Pepe Sánchez. 

Así fue que comencé a maravillarme de la letra de Robin Wood, cada vez que le echaba mano a una revista, buscaba su nombre en las autorías de las historietas, casi seguro que había algo de él para leer.

No me quiero extender en describir sus capacidades para escribir sobre cualquier tema o género, por que ya mucho se ha escrito sobre él y muy merecido tiene ser reconocido mundialmente. 

Mejor lo homenajeamos de la mejor manera que sabemos hacerlo en Columberos; compartiendo con ustedes que ya lo conocen, y con aquellos que tal vez lo estén conociendo ahora, apenas algunas de las genialidades que salieron de su pluma. Espero que lo disfruten.

Alberto Carmona: Elegir una serie o personaje creado por Robin Wood no es tarea nada sencilla, ya que, como sabemos todos, su capacidad creativa a lo largo de los años arrojaron el resultado de grandiosas historietas. Por lo tanto, en lugar de debatirme conmigo mismo, y de exigirme en un proceso de pensamiento que incluya análisis, comparaciones y demás actividades intelectuales, he preferido dejarme guiar por el “corazón”, por la intuición, por la experiencia directa relacionada con mi infancia. Precisamente, en aquel entonces, en esa niñez (pero también en la pubertad, preadolescencia y adolescencia) había una historieta de Robin Wood que me fascinaba: Mark, dibujada por el talentoso Ricardo Villagrán. 

Había algo en esta serie que cautivó intensamente mi atención y mi entusiasmo. Por un lado, todo un conjunto de seres extraños y fabulosos como los “Mutantes”, esas criaturas horrorosas y deformes llenas de odio y resentimiento hacia los humanos, siempre ávidas de sangre. 

Pero no eran los únicos. La secta de los “Destructores" constituían una amenaza igual o peor a la de los mutantes. También estaban esas aguerridas mujeres, las “Amazonas", que luchaban por posicionarse en la cumbre del poder por sobre los demás grupos. 

Y por si esto fuera poco, los seres humanos de “La Ciudad" intentaban prevalecer echando mano de los recursos de la ciencia y la tecnología,  a veces motivados por buenos deseos, pero otras por el egoísmo y la confusión. 

¡Qué mundo éste de Mark! Y precisamente a eso iba. Porque lo otro que me impactó fue la desaparición del orden civilizado tal cual lo conocemos. En Mark ya no existían leyes, ni códigos civiles o penales. Cada quien sobrevivía como podía, usando cuchillo, pistola o ametralladora. Las instituciones humanas se habían derrumbado por completo. Y al derrumbarse, se vinieron abajo esas vallas de contención que nos impiden exterminarnos los unos a los otros. Ahora las pulsiones destructivas y de muerte del ser humano carecían de contención, liberándose y mostrando  la peor cara de la humanidad. Aunque, nobleza obliga, hay que resaltar también la decisión de algunos personajes de no perder las cualidades más nobles del ser humano. 

Sí, esa posible realidad post apocalíptica fue altamente deslumbrante para mí. Tal fue el impacto, que tras algunas décadas de haber leído Mark por primera vez, sigo afirmando que es una de mis series preferidas del gran e inolvidable Robin Wood.

Juan Domingo Dorsch: Jackaroe - 019 - Buitrango murió en la noche (Publicado en D'artagnan 223 de marzo de 1970)

Este episodio de Jackaroe me gustó mucho porque creo yo que representa el sentimiento de todos los que tuvimos un amigo de verdad que murió de manera sorpresiva, y lo vamos a extrañar seguro con el paso de los años, como me pasa a mi.

Cristian Tirimacco (Cristian): Creo que a diferencia de la mayoría, mis primeros acercamientos a la obra de Robin no tienen nada que ver ni con Nippur, Dago, Savarese o alguno de sus personajes más conocidos. No recuerdo con exactitud cual fue la primera historieta que leí de él, pero seguramente se trató de algún episodio de "Helena" o "Mi Novia y Yo" ya que mi primer contacto con Columba fue cuando tenía 8 o 9 años a través de algunas revistas Intervalo de principios de los 80 que guardaba mi vieja y esas eran las series que aparecían ahí. Por esos años también, un vecino me prestó unas Fantasías entre las que estaba la que publicó el episodio de "Wolf" donde Rorgan y Fiona son asesinados, eso me dejó con muchas ganas de saber como seguía la historia, cosa que recién pude hacer mucho años después gracias a scans.

Ya a fines de los 80, con 10 años encima y a fuerza de insistencia conseguí que mis viejos me dejaran comprar alguna de las revistas de Columba en forma regular. Así arranqué a coleccionar Fantasía, tal vez mi elección habrá estado influenciada por aquellos viejos capítulos de "Wolf" que había leído, aunque sinceramente no lo recuerdo. Por 1990 empezaron a aparecer varias series de Robin en Fantasía, poniéndolas en un orden de preferencia personal de mas a menos: "Morten", "Port Douglas", "Raycon" y "Larsen & Finch". Independientemente de mi criterio, todas eran muy buenas historias y tenían ese estilo inconfundible de Robin que nunca encontré en otros autores, sin embargo es el episodio final de "Larsen & Finch" el que hasta el día de hoy sigo recordando tanto por el desenlace que tuvo la historia como por el contexto en que lo leí.

Para ese entonces, fines del año 1993, las revistas de Columba llegaban en forma dispar al interior, o al menos a mi pueblo, por lo que había meses que no las podía conseguir y cualquier oportunidad de comprar alguna no se podía desperdiciar. Habíamos viajado con el colegio secundario a Buenos Aires a conocer la ciudad, enfrente del hotel donde parábamos había un kiosko y entre las revistas estaba la Fantasía donde salió ese capítulo. Finalmente me la compré para leerla en el viaje de regreso y me acuerdo que al leer ese episodio final me quedé con un nudo en la garganta, porque realmente no me esperaba que la serie terminara y mucho menos de esa manera. Para mí "Larsen & Finch" era una serie mas bien distendida, que a veces te arrancaba una sonrisa por las situaciones que vivían los protagonistas y el final resultó un derechazo directo al mentón.

José Eduardo Rivero: Cuando era un niño y comencé a ver las revistas de Columba, al principio solo me inclinaba a ver los dibujos, me gustaba mucho los dibujos, eso me llamaba más la atención que leer las historietas, pero a medida que fui creciendo, no recuerdo la edad que tenía exactamente, pero de a poco me fui interesando más en las historietas de la Editorial Columba. Ya cuando comencé a leer las revistas de Columba, recuerdo que mi primera historieta fue “WOLF”, me gustó mucho la historia, el drama, las peleas con espadas, las batallas, a partir de ahí ya no miraba solo los dibujos, también los leía, pero no toda la revista, solo algunas series. Pero siempre que leía, lo hacía por mi inclinación a los dibujos, y esta serie de “WOLF”, me encantaba ver esos dibujos tan perfectos. Ya cuando fui entrando a mi etapa de adolescente me interesé más en conocer a los autores, tanto al guionista como al dibujante, y ahí recién fué cuando conocí a Robin Wood, pero solo por su nombre real, y que esta historieta que leí por primera vez fue escrita por este gran autor y con el tiempo casi entrando a mi etapa de adulto, fue cuando supe también que era autor de un gran número de series e historietas unitarias utilizando una gran variedad de seudónimos en sus guiones. Esta serie de ¡WOLF!, y los dibujos de Jorge Zaffino y Rubén Meriggi, fue lo que hizo que me incline a leer otras series parecidas, como el Hitita, Nippur de Lagash, Kayan. Pero ya después en mi etapa de adulto me gustaban muchas otras series de Columba, pero ¡WOLF! fue la que más me llamó y siempre que leía una revista me fijaba primero si en esta revista estaba esta serie para comenzar a leer primero y luego el resto de la revista. Otras de las cosas interesantes que me pasó en mi época de niñez, es que me gustaban las historietas en color, quizás porque a la edad que comencé con lo de Columba, eran revistas del momento las que leía, y yo comencé a leer en la década del 80, cuando ya salían en la mayoría todas las historietas en color, salvo algunas revista como la extracolor y supercolor que venían todavía algunas historietas en blanco y negro, inclusive series que comenzaron en sus primeros episodios en blanco y negro y luego continuaron a color. Por último también me gustaron de Robin Wood los unitarios, sobre todo si eran estilo bélico, estas historietas actualmente me encantan y es por eso que voy a compartir con todos los seguidores de “COLUMBEROS” en este especial de los 10.000 posteo algunos unitarios de Wood.

Egidio Esteban Passamonti: Cuando llegó Robin Wood a la Editorial Columba, ya hacía tiempo que me deleitaba con las publicaciones de la misma (Intervalo principalmente), cada mes al adquirir un ejemplar era un disfrutar al máximo su contenido; como esperar cada viernes el Intervalo Semanal o los miércoles el Tony semanal. Sobre ésta última compraba dos ejemplares. El motivo de ello se debió a que para mi localidad el distribuidor de revistas le requería al kiosquero un envió mínimo de dos, y siendo yo el único comprador, me quedaba con ambas ya que era la única manera de poder tenerlas. Al comenzar este escritor sus publicaciones, fue el autor primordial al abrir una nueva edición, y siempre han sido mi prioridad de lectura la dupla Robin Wood y Carlos Vogt.. No pasaron muchos años que (cuando apareció la era del color) las revistas apenas si llegaban a mi localidad y las adquiría cuando viajaba a otros puntos de mi provincia. Apenas si conocí a sus personajes, como: Dago y Nippur. Recién ahora, gracias a Columberos, la deuda pendiente que tenía sobre las historietas se cumple. ¿Hubiera yo imaginado que mi deseo de ellas llegaría años más tarde? Gracias Columberos por hacer posible ello. 

Miguel Carlucci: Un sábado de 1982 después de visitar a mis abuelos con mi Papá caminamos por la Av. Montes de Oca en Barracas y nos detuvimos en un kiosco, mi viejo pide el diario y luego me encara a mi preguntando: "y vos que querés llevar?". No era la primera vez que me hacía esa pregunta ya que anteriormente me dio con todos mis gustos: Patoruzito, Gattin, Don Nicola, Meteoro y tantos otros. Pero esta vez me impactó la tapa de una Nippur Magnum 33 con Dennis Martin corriendo; fue llegar a casa y devorar ese ejemplar. No recuerdo el primer capítulo leído de ninguna serie, la excepción es Las Manos Sangrientas de Dago, seguramente habrá episodios mejores o mas determinantes  pero este capítulo escrito por Wood me atrapó y no me soltó mas; luego fue esperar mes a mes la Nippur Magnum y maldecir cuando de vez en cuando no figuraba Dago en el índice. Los Columberos teníamos que elegir un capítulo de Robin y yo elijo este porque fue mi primero y porque encendió la llama de una pasión y sin pasión no se vive, gracias Robin!! Y gracias Salinas!!

Walter Gallardo: Corría mi infancia en un pueblo perdido de las sierras cordobesas llamado San Esteban. Fue allí donde conocí las revistas de Columba. Las primeras con las que tomé contacto y diría que con ellas casi aprendí a leer, fueron las Intervalo de mi madre y de mi tía. En un primer instante la historieta que más me llamó la atención, quizás por el dibujo o por el humor, fue Mi Novia y Yo. Sin saberlo había entrado de lleno al vasto universo de las historias de Robin Wood. Y fue precisamente esta aventura de Tino vestido de Zorro (otro de mis personajes favoritos) la que me fascinó y continúa emocionándome hasta el día de hoy cada vez que la leo. Desde entonces no pude parar de leer estas historietas. En aquellos años las vivenciaba bajo los manzanos y el nogal de la casa de mis abuelos, a la orilla del río o en el bosquecillo fresco y silencioso de aquel pueblecito que descansa a los pies de las serranías. Un lugar al que ansío volver alguna vez, acompañado de esta historieta en un infantil intento de recuperar una parte de aquella hermosa infancia que quedó, inaccesible, en el pasado.

Roberto Llamazares (Roberllama): Año 1978. Ya había conocido a El eternauta, y pensaba que ya no leería algo semejante nunca más. Me equivoqué: aparecía un héroe apocalíptico, con un argumento, no nuevo, pero para mí sorprendente, y no solo por la poesía del genial Robin Wood sino por unos dibujos sorprendentes, de un formidable Ricardo Villagrán en el cénit de su arte!. Mark ha llegado!!

Me identifiqué de inmediato con aquel niño adolescente que tuvo que vivir un tiempo totalmente aislado en una tumba de plomo para no ser afectado por la radiación de la superficie, que luego tiene que crecer en un mundo hostil y violento plagado de mutantes amarillentos y putrefactos. Adaptación, crecimiento, supervivencia y aprendizaje, y luego el largo camino a través de una lucha sin cuartel. En fin, toda una vida, de continuas aventuras, que nunca van a terminar, porque esos seres fétidos y nauseabundos, siguen acechando por las noches en las calles de cada ciudad!.-

Pedro Baigorria (Pebacba): Como el tema para este posteo 10000 es algún episodio de Robin Wood que nos haya marcado o impactado, es difícil… hay tantos que la memoria se pierde en todas esas emociones y sensaciones, junto con los años vividos; Pero bueno aquí vamos… 

Uno de los episodios que más me ha impactado es el “EL REGRESO DE GILGAMESH”, aparecido en la revista D'artagnan Todo Color Nº 2 el 6 de marzo del año 1980.

Yo siempre fui un fanático del personaje, que hasta ese momento estaba discontinuado desde el año 1975, por lo que este regreso, y contado (nada menos) que por Robin Wood, fue algo emocionalmente… indescriptible, esto sumado a que, con mis 18 añitos recién cumplidos, había empezado a vivir sólo en una ciudad inmensa, lejos de mi pueblito y mi familia, con todo lo que ello implica. Así que este capítulo y su continuación fue una compañía al desarraigo y a las nuevas vivencias en este período de mi vida… y por supuesto, el maestro Robin Wood, NO ME DEFRAUDÓ.

Y ahora, la parte que más les interesa a Uds.: las descargas de historietas.

Kayan - 48 - Crónicas de Kayan (episodio final de la serie, dedicado a Walter Gallardo)

Publicado en la revista Fantasía Supercolor N° 60 impresa el 18 de Diciembre de 1980, con guion de Robin Wood y dibujos de Gómez Sierra (escaneado por toritodel2001).

Dago - 071 - El valle del jenízaro (dedicado a Miguel Carlucci) 

Publicado en la revista Nippur Magnum N°66 impresa el 30 de Abril de 1987, con guion de Robin Wood y dibujos de Alberto Salinas (escaneado por toritodel2001).

Mi Novia y Yo - ESN - Versión archilibre de Los Tres Mosqueteros, publicado en la revista Intervalo Extraordinario N° 343 impresa el 19 de Noviembre de 1974, con guion de Robin Wood y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Diego_S) 

Pepe Sánchez - 059 - Sánchez de Arabia, publicado en la revista El Tony Supercolor N° 51 impresa el 25 de Marzo de 1980, con guion de Robin Wood y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Diego_S)

Lorenzo de Arabia, unitario humorístico publicado en la revista D'artagnan Anuario N° 15 impresa el 05 de Enero de 1984, , con guion de Robin Wood y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Diego_S)

 

Patrulla, unitario bélico publicado en la revista D'artagnan N° 186 impresa en Septiembre de 1968, con guion de Noel Mc Leod y dibujos de Lucho Olivera (escaneado por Juan Domingo Dorsch).

Un peligro para Alan Anders, unitario de aventuras reeditado en la revista Fantasía Anuario N° 20 impresa el 10 de Enero de 1985, con guion de Noel Mc Leod y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Cristian).

Mi Novia y Yo - 158 - Con coronita, publicado en la revista Intervalo Cinecolor N° 26 impresa el 29 de Septiembre de 1981, con guion de Robin Wood y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Cristian).

Mi hermano León, unitario bélico publicado en la revista D'artagnan N° 179 impresa en Junio de 1968, con guion de Robin Wood y dibujos de Lucho Olivera (escaneado por José Eduardo Rivero).

Un trabajo para expertos, unitario bélico publicado en la revista D'artagnan N° 185 impresa en Septiembre de 1968, con guion de Robin Wood y dibujos de Enrique Cristóbal (escaneado por José Eduardo Rivero).

Algo viene desde las estrellas, unitario de ciencia ficción publicado en la revista D'artagnan N° 185 impresa en Septiembre de 1968, con guion de Mateo Fussari y dibujos de Alberto Balbi (escaneado por José Eduardo Rivero).

¿Quién quiere ser héroe?, unitario bélico publicado en la revista D'artagnan N° 204 impresa en Junio de 1969, con guion de Robert O'Neill y dibujos de Juan Dalfiume (escaneado por José Eduardo Rivero).

La trampa, unitario deportivo publicado en la revista D'artagnan N° 204 impresa en Junio de 1969, con guion de Mateo Fussari y dibujos de Oscar Carovini (escaneado por José Eduardo Rivero).

Antología de la pintura y sus consecuencias, unitario humorístico publicado en la revista Intervalo Album N° 201 impresa en Marzo de 1969, con guion de Robin Wood y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Esteban Passamonti).

Beatriz, Beatriz, Beatriz, unitario humorístico publicado en la revista Intervalo Album N° 210 impresa en Julio de 1969, con guion de Robin Wood y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Esteban Passamonti).

Chindits - 32 - El Brigadier, publicado en la revista Fantasía Extracolor N° 332 impresa el 11 de Octubre de 1979, con guion de Robin Wood y dibujos de Clemente Rezzónico (escaneado por Miguel Carlucci) 

Mi Novia y Yo - 164 - La Leyenda del Zorro, publicado en la revista Intervalo Todo Color N° 12 impresa el 08 de Junio de 1982, con guion de Robin Wood y dibujos de Carlos Vogt (escaneado por Walter Gallardo).

Saltemos por las suecas, unitario deportivo publicado en la revista D'artagnan N° 247 impresa el 25 de Febrero de 1971, con guion de Robin Wood y dibujos de Horacio Altuna (escaneado por Roberllama)

Gilgamesh, el inmortal - 049 - El mensajero de mañana, publicado en la revista D'artagnan Color N° 30 impresa el 18 de Agosto de 1983, con guion de Robin Wood y dibujos de Lucho Olivera (escaneado por Pebacba).