"Señor, Dios mío, Tú sabes de mis formas espontáneas y propias de rezar. Fui olvidando las oraciones clásicas que aprendí de niño. Opté, en cambio por dialogar contigo, sí, porque yo hablo y sé que Tú me escuchas".
Editado en revista Intervalo Súper Anual 47, en noviembre de 1993. De José Luis Arévalo, con dibujos de Enio.
(2012)
No hay comentarios:
Publicar un comentario