La hacienda se llamaba La Clorinda y
era inmensa. Tenía su iglesia, su cementerio, su lago particular y un parque
inmenso y se iba a convertir en la cárcel de Beto. Apenas llegan, don Enzo le
ordena a un peón llamado Juan que lleve las valijas del chico a un galpón
bastante alejado, donde conviven ratas y un gato en perfecta armonía entre la
mugre y el abandono que envuelve todo. Tratando de sobrellevar la difícil
situación en la que se encuentra, Beto infla una pelota de tiento que tiene
entre sus cosas y se pone a jugar. Sin embargo, lo descubre don Enzo que le
exige que se la entregue y el muchacho lo desafía.
Ficha de la Historieta
- Drama - Deportivo / 11 páginas
- Por Eugenio Reynal Arrigo (Eugenio Zappietro) / Dibujos de Clemente Rezzónico
- Edición original / D'artagnan Todo Color 73 (29/01/1987)
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